La muerte de un alma muerta

Estaban los tres:
La madre sexy y joven.
El padre borracho y artista,
y el niño que hacía castillos de arena en la playa.

El señor Ansí,
dibujaba con el humo del cigarrillo, pajaritos de nicotina sobre el viento.

Kiara lo miraba
mientras las olas golpeaban las rocas.

Sólo estaban los tres...
Ningún mentiroso los interrumpía...

De repente,
de un hueco en la arena,
salió una rata,
y el perro que los acompañaba comenzó a perseguirla,
hasta que la agarró,
la tomó por la cabeza,
y con sus filosos colmillos,
la mordió duro
y se la arrancó.

Entonces la arena rubia se llenó de sangre de rata,
y los tres miraban al perro divirtiéndose con el roedor.

Luego el señor Ansí se puso de pie,
caminó hacia el mar,
y en la orilla dejó que las olas terminarán el recorrido en sus pies.

Había bastante silencio.

El sol era extraño,
pero la belleza de su esposa,
era mágica
y la inocencia de su hijo,
lo enamoraba.

En ese preciso instante,
observando su alrededor,
unas notas de piano sonaron en su cabeza,
cerró los ojos y movió los dedos
intentando unir el mar,
la belleza,
la inocencia
y la muerte de una rata,
con el sonido del viento y el silencio.

Pasaron los días,
y cuando el señor Ansí regresó a su departamento en Nueva York.
En la pared blanca que había en aquella sala
escribió con pintura azul:

Aquí en el mar.
La muerte es la belleza del silencio.
Y tu belleza me hace reencarnar en el viento.


Sr. BM

Con ganas de hablarle

Con ganas de hablarle.
De decirle que me gustan su uñas pintadas de rojo mientras la veo limárselas.

Con ganas de besar unos labios gruesos.
Morderlos suave, como si fueran una fresa.
Mientras disfruto el sabor de su boca.

Con ganas de irnos juntos a un bar.
Tomar y fumar.
Luego ir a su departamento.
Y besarnos.
Y bailar.

¡Oh sí!
¡Bailar!

Bailar lento.
Con la luz tenue amarilla.
Dándome la espalda.

Tomándola de las caderas.
Oliendo su cuello.
Y excitándose mientras la marihuana se extingue.
Mientras la noche avanza.
Y el frío nos tienta a dormir juntos.

Teniendo sexo.
Lujurioso.
Sucio.
Morboso.
Sexy.
Con pasión y deseo.

Tal vez es un único día de deseo.

Deseo tenerla.
Deseo encontrarla.
Y cantar juntos.
Con el pasto y la luna.
En la montaña y en el mar.
Observando su sensualidad.
Su calentura.
Su sonrisa.
Su ser femenino.

Luego quedándome en silencio,
mientras este instante.
Se desvanece con el pasar de los días.

¡ Me encantan las uñas pintadas de rojo!

Sr. BM

Basura

Esta es la única forma en que puedo sacar la basura de mi alma.

Tirarla a una hoguera encendida por frases

y echar a arder todos los pensamientos que se aferran a mi corazón.


Para llorar.

Para sentir...


No lo sé.

Como tampoco sé por qué el dolor sabe a tristeza.

Ni porque escuchar a Louis Armstrong produce que escriba mis lágrimas aquí,

en silencio.


Un domingo que quedo bajo una lluvia lenta.

Cansada.

Y dolida.


Dónde una lágrima cayó

luego de escuchar tu voz por el teléfono.


Por eso,

supongo que en días como los de hoy

a pocos les interesa el amor.


Pero sé que necesitan zapatos,

autos,

nombre,

nivel,

estatus,

gloria,

sueños olvidados...


También creo que obvian

que vivimos en una obra absurda,

y que por eso,

los locos nos enfermamos de arte.


De ilusiones.

De pieles que huelen a viento y a selva.

Y fabricamos armas que disparan belleza

cuando pensamos en ella,

en silencio.


Pero hoy,

estoy tratando de calmar las ansias

en medio de esta selva urbana

llena sirenas con escamas de hierro

que con una pequeña y dulce mirada

desorganizan el bangon olvidado en el que vive Luis.


Por si no lo saben damas y caballeros.

Señoritas sexys.

Y hombres holgazanes,

resulta ser que Luis

un venezolano olvidado en la frontera.


Un hombre lleno de vacio

que cuida los carros por las noches en la oscuridad.


Al que le le dispararon dos veces en la cabeza...

Ha dejado de reír.

Y sólo desea morir con agujas y balas.

Abrazando su botella.

Cobijado bajo el crack

y la amargura de su pasado.


Quizás no te importe mucho mi dolor ni mi forma de ver el amor.

Pero en estos momentos

mientras te olvidas de mi.


Mientras descansas de tu cansancio mental semanal.

Mientras pasas mi sonrisa a otro capitulo.

Mientras mis ansias tratan de apaciguarse,

Luis se ha convertido en un muerto que va caminando por las calles de una humanidad interesada en el olvido,

y por la que no me gusta caminar.


Pero los dioses,

desde el más allá,

con las piernas cruzadas

ven a Luis con los pies descosidos por la calle.

Alimentando su silencio triste

en un desierto de piedras y sombras

Y no comprenden,

que lo único que necesita Luis.

Es amor.


Probablemente muchos mueran tratando de conseguirlo.

Ese es el caso de mi nombre:

muerto en vida

en una casa desorganizada por los sentimientos.

Vigilada por una bestia solitaria

que está herida

en el lado izquierdo del pecho.


Sr. BM.

Cayendo

Dejando que se derrame el peso de los recuerdos
para dejar ir la monotonia del delirio por caminos que no den miedo.

Fumandome la vida de noche.
Cruzando la luz tenue en un tren lleno de letras.

Un viaje desnudo,
asotado por una lluvia y la locura,
que cae sobre el techo de una casa
que nadie sabe dónde es...

Voy a un bagon que está de fiesta
y pongo los pies encima de la tristeza de esta ciudad.

Por un instante entiendo que debajo de tus miedos guardas poesias llenas de polvora
para cargarlas en el infierno
y detonarlas en el cielo.
explotando entre risas que se parecen mas al silencio que a la verdad...

Dejas que te cresca la barriga y el cabello
para tocar las letras como si tocaras el piano...
Y poder darle forma a esa agonia
que de vez en cuando
se vuelve arte.

Le das sonido al olvido y al misterio,
y una imagen,
a la oscura realidad melancolica y metalica por la que sobrevives comiendo animales muertos.
Asesinasdos
o en vias d e extinción.

Mueres sin sentir la deforestción de arboles,
La explotacion mineral.
O haces tu vida tan normal como los que olvidan y aceptan ser olvidados
para refugierse el un discreto sentimiento hacia Dios.

Mientras el humo golpea mis rostro teñido en luz tenue.
intento poner mi corazón en la tierra
para morir y volever a empezar...

Lejos de las selvas que yacen muertas bajo el concreto.
Sin el sentimiento de la tecnologia apoderandose del cerebro.

Sintiendo vertigo cuando los perros me miran con un maldito ruido en su boca.
Y cuando la victoria se abraza con fervor a la alegeria.

Todo esto suena al dolor que siento en mis riñones mientras escribo con la luna y la miro.

Cuando me siento en una roca a sentir el amor sin conocer a nadie.
Sumergido en la espuma de un mar abierto azul.
con sonrisas desconocidas que valen mas que el olvido.

Luego me voy a una fiesta cabarete a escuchar el piano.

A beber.
A fumar,
y enamorarme de alguna chica que ganas de ser amada mientras todos me disparan en silencio.

Intentan grabar mi nombre en la historias.
en la oscuridad de este apestoso mundo.

Tan hipócrita como la iglesia.
Tan absurda como el hombre.

Quien desde siempre nos enseña a no tener confianza...
A venderle el alma al diablo en un baño
mientras te masturbas contra la pared
y eyaculas en tu sueños.

Saltas,
gritas,
sudas.

Limpias tus alas con lluvia
mientras nos destruidos con política.
Y con armas que nos hacen actuar
como si estuviéramos mordiéndonos en el infierno
bajo llamas de lujuria.

Brujería

Intentas con tranquilidad dejar ir todo aquello que es imagen.
Pero es tan difícil.
Tan putamente difícil estar en tranquilidad con lo natural...

Intentas despegar las alas de ese alambre que las tiene atadas.
Pero te acorralan desde todas partes

Desde los gobiernos.
Desde las guerras.
desde las noticias.
Desde las mentiras.
para pensar en el suicidio,
en la muerte.
En los caminos que recorres para poder encontrar la verdad.

La vez ahí,
sin respuestas.

Con su nombre,
con su historia.
Y gritas en silencio tu dolor para no despertar a nadie.

Lloras como la lluvia para limpiar el corazón,
pero vuelves a soñar con esa figura que se pierde en los escombros
de una historia llena de ecos que suenan en tu cabeza.

Y te dan tantas ganas de tener su cuerpo tu lado.
Morderlo.
Lamerlo.
Besarle la frente despacio.
Con los ojos cerrados de placer.
De amor.
Embistiendo su cuerpo con poesía.

Sintiendo el calor de su abdomen
y la delicadeza de sus sueños.
De sus misterios.
De su melancolía condenada a vivir para amar.
Aunque sea poco lo que vivas para olvidar su sonrisa.

Entonces,
sin más acciones,
sin más guerras,
sin más muertes,
sin más despedidas
con la brujería de los miedos
quedas con un dolor
esperando a que vuelvan por ti
y le den ese refugio caluroso
que necesita tu olvidado corazón.

Sr. BM.

El genio de la multitud

Disculpalo por no saber que la población general tiene plena comprensión de Dostoyevki, Sartre o Camus. Bukowski es un escritor con talento reconocido, como lo demuestra el tiempo, y solo basta con leerlo para saber que el despreciaba a intelectuales y a idiotas por igual.